Cierra los ojos e imaginate conmigo una niñita muy muy pequeñita... una prematura chiquitita que nació demasiado pronto. Imaginate cómo le quedaba la ropa de enorme en su cuerpecito y cuánto tardaba en comer con esa boquita.
Ahora abre los ojos y mira esta foto! Puedes creer que esta preciosidad ha sido una pequeñísima niña prematura? Miralá!! Esta niñita tan regordeta llegó al orfanato como un bebé prematuro muy pequeñin, y puedes ver lo bien que está ahora! Es una niña que come muy bien y se acaba su biberón en tres minutos. Pesa unos 6 kilos! Siempre está feliz. Nuestra manager en China nos dice que "esta niña es como un Buda que ríe"
Así es como nos gustan: regordetes y felices! Algunas veces la realidad es mejor que la imaginación.
Suzanne Damstedt
Nutrition Director
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