En 2011 tuvimos el placer de conocer a una niña muy especial de cuatro años y de la provincia de Guizhou, llamada Alejandra.
En aquel entonces su orfanato en Tongren pidió nuestra ayuda para poder operarla de su fisura labial y palatina.
Alejandra antes y después de su operación.
Desde ese momento no pudimos olvidar su viva mirada, su brillante sonrisa y sus encantadores hoyuelos. Ahora tiene ocho años y todavía parece una niña alegre, cariñosa y entusiasta.
El año pasado Alejandra empezó a ir al colegio, al ciclo de educación infantil, apadrinada por nuestros generosos donantes a través de nuestro programa de Ayuda al Alumno Huérfano.
Sus profes nos dicen que ha hecho enormes progresos durante este curso. Lo que más destacan es su enorme mejoría en matemáticas. Hace las tareas escolares a tiempo y cada vez está más y más segura haciendolas. Le gusta especialmente ayudar a las profes con los compañeros de clase más pequeños y a sus amigos.
Nos enorgullece mucho saber que terminó con éxito la educación infantil y que ¡ya va a primaria!
Lo que más valoran las profesoras es su bondad y su naturaleza amigable. Alejandra es descrita como una niña que es capaz de dejar lo suyo para cuidar a los niños más pequeños; tiene una actitud muy protectora para con ellos.
Ha sido un placer ver a Alejandra florecer desde sus operaciones de fisura y volverse una alumna segura de sí misma y una buena amiga. Damos las gracias de corazón a todos los que apadrináis su educación por creer en su potencial.
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