De vez en cuando, nos gusta mostrar historias de adopción de niños que han salido en el blog de LWB. Es increíble ver que los niños por los que tantos han soñado y esperado que encontrasen una familia, finalmente tienen esa oportunidad! Creemos que disfrutarás leyendo la historia de adopción de un niño pequeño que estuvo en un orfanato que es parte de nuestro programa de asistencia a orfanatos. Su sonrisa y dulce expresión, llegó al corazón de su futura madre, y esta es la historia de como se convirtieron en familia.
En 2003 adoptamos a nuestra primera hija, Sophia, una niñita preciosa de Hunan, China. Cuatro años después, adoptamos a nuestra segunda hija, Aimei, una niña muy bonita de 2 años de Anhui, China. Estábamos bastante seguros de que habíamos "terminado" de añadir miembros a la familia. Pero siempre estaba ahí el pensamiento de que tal vez uno más, un chico, no estaría mal. En el otoño de 2010, cuando empezábamos a ser mas independientes como padres (no mas pañales o problemas de sueño, y las dos niñas en la escuela), recibimos una carta de nuestra antigua Ecai que decía que volvían a estar certificados para tramitar adopciones en China de nuevo. Le reenvié el mail a mi marido.
Tengo que explicar... que hace unos años era voluntaria de LWB como coordinadora del blog. Así que, durante unos años, a diario, veía preciosas caritas de niños esperando familia. Siempre estaba en mi mente que con seguridad podríamos volver a adoptar.
AL mismo tiempo, Love Without Boundaries escribió un blog mostrando a tres niños de un orfanato donde tenían un programa de asistencia al orfanato ("Perry, Jared y Nate: los chicos siempre serán chicos!") La foto de "Perry" durmiendo, y a continuación otra despierto, en el suelo muy atento, conquistó mi corazón. Sencillamente no podía quitármelo de la cabeza.
Decidimos empezar el proceso de adopción. Investigué un poquito sobre "Perry" y descubrí que estaba en la lista individual de una Ecai. Seguimos con el proceso, sabiendo que el niño que nos asignasen estaría en la lista compartida. Pero al final, "Perry" volvió a la lista compartida cuando nosotros estábamos listos para recibir asignación. Menos de un año después, toda la familia viajamos a China a adoptar a nuestro niñito, John Patrick Xianpei, todavía conocido como PeiPei.
Este pequeño es un hermoso regalo para nuestra familia. Continuamente nos sorprende ver lo ingenioso, listo, valiente y sencillo que es. Estábamos muy preocupados de adoptar un niño de 3 años. No teníamos ni idea de si se resistiría, lloraría, gritaría... nunca se sabe. Pero resultó que tuvimos suerte. Parecía muy dispuesto a aceptarnos como su familia, y después de unos minutos, permitió que John lo cogiese en brazos. Tenerlo con nosotros nos aportó una sensación de alivio, un sentimiento de "Si, podemos hacerlo!".
Durante los primeros meses en casa, PeiPei y yo llevábamos a las niñas al colegio, y volvíamos a casa para tener largos momentos de mimitos en el sofá, o para hacer recados y jugar. En esos días también íbamos a un coro infantil en el vecindario una vez por semana, a leer cuentos en la biblioteca o a hacer volteretas al gimnasio del barrio.
Después de 3 meses en casa, duerme toda la noche de maravilla, y se despierta con una sonrisa. Todavía canta canciones en Cantonés (aunque ya no tan a menudo) y tiene algunos bailes con coreografía que aprendió en algún momento de sus 3 años en el orfanato en China. Ya sabe docenas de palabras en inglés. pregunta "que es esto?" 50 veces al día, y le encanta despertarse de la siesta para recoger a las niñas del colegio!
Hemos estado en el dentista, cirujano pediátrico, otorrino y cirujano plástico, con informes positivos en todos. Parece que a pesar de tener un solo oído completamente formado, no ha dificultado su dicción, y su audición es bastante buena.
Este pequeño es pura alegría, y nosotros somos su familia!
~ Alisa Hall, mamá de PeiPei
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