A finales de 2012, LWB recibió una llamada de un orfanato rural que acababa de encontrar a unos gemelos prematuros a las puertas de su centro. Eran un niño y una niña muy pequeñitos, pesaban tan solo 1 kilo cada uno. Luego supimos que la niña había fallecido antes de que pudiera ser ayudada. El hermano, al que llamamos Etan, fue llevado inmediatamente al Hospital Infantil Provincial, donde ingresó en la UCI Neonatal para que le trataran de urgencia.
Semana tras semana celebrábamos el progreso de Etan en el hospital, hasta que al fin le dieron el alta y vino a vivir a la Casa de Curación de Anhui, con un peso de unos dos kilos. Nuestras cuidadoras entraron en acción, atendiéndole y alimentándole con mucho cuidado. Unos meses después de llegar ya era la viva imagen de la salud. Prontó robó los corazones de todos con sus muchas expresiones y también pronto empezó a alcanzar hitos importantes del desarrollo como poder rodar sobre sí mismo y agarrar bien los juguetes. Hacia verano, ya pudo dejar la casa para entrar en nuestro programa de familias de acogida en Zhang Village, donde sus abuelos de acogida están absolutamente locos por él. Bajo sus cuidados, Etan sigue saliendo adelante.
Aunque nos sigue pesando en el corazón que la hermana gemela de Etan falleciera, estamos muy contentas de que este pequeñito haya superado todos los pronósticos y sea tan completamente querido. Nos hace sonreír leer sobre el abuelo, que su actividad favorita durante el día sea llevarle a dar "vueltas por el pueblo", o cuando su abuela nos dice orgullosa que lo que más le gusta hacer es explorar sus alrededores, aunque eso signifique sacar toda la ropa del armario o quitar los zapatos de su sitio. No nos sorprende nada saber que la nueva palabra favorita de Etan es "bao" (llévame)! Es un niño precioso al que le gusta estar donde esté la acción.
Damos las gracias de corazón a todos los que ayudásteis apadrinando la transformación de ETan. ¡Muchas gracias por darle una oportunidad para una vida sana! Sabemos que cualquier día nos dirán que Etan ha dado ya sus primeros pasos, y entonces pensaremos también en sus abuelos, que seguramente van a tener que corretear todo el día detrás suyo :-)
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