En este pueblo de Camboya, muchos de los padres han tenido que emigrar en busca de trabajo, y los niños son los que se conocen como "dejados atrás." Como ya contamos en esta entrada al blog: Hambre en Camboya, este país tiene la tasa más alta de mortalidad infantil de niños menores de cinco años de todo el sudeste asiático, siendo la malnutrición una de las causas principales. Según diversos informes, hasta un 45 por ciento de todos los niños camboyanos -más de 1 de cada 3- tienen atrofia del crecimiento debido a la malnutrición.
Para atacar este problema hemos empezado un programa de almuerzos calientes en nuestra escuela Cree En Mí y hemos contratado a dos mujeres de la localidad para que gestionen, comprando y cocinando, las comidas de los alumnos de Rangsei.
¡Tengo mi plato!
¡Hay que lavarse las manos antes de comer!
¡A la fila!
Dando las gracias a las que han preparado la comida
¡Hora de comer!
Como podéis ver, el arroz es un alimento básico en su dieta y parte del programa de almuerzos calientes. Sin embargo, el arroz por sí mismo es una proteína incompleta, lo que quiere decir que no contiene todos los aminoácidos esenciales que los niños necesitan para crecer y desarrollarse adecuadamente, y por eso le añadimos proteínas y lo completamos con fruta todos los días.
¡Las tripitas llenas hacen que sea más fácil concentrarse en la escuela!
Disfrutando de unas mazorcas de maíz
Aunque la educación va a alimentar sus almas, sabemos que alimentar sus cuerpos es igualmente esencial. Por favor, únete a nosotros para dar de comer a estos niños un almuerzo caliente y nutritivo.
Os agradecemos tanto las donaciones puntuales como los apadrinamientos mensuales para nuestros Proyecto de nutrición escola en Camboya y nuestra escuela Cree En Mí de Rangsei.
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